Consejos para el cuidado de semillas germinadas

Las semillas germinadas necesitan de algunos cuidados especiales para crecer fuertes y saludables. En este artículo te presentamos los mejores consejos y recomendaciones expertas para el cuidado de semillas germinadas.

Macetas pequeñas

En primer lugar es importante que tengas en cuenta que las semillas germinadas no requieren de recipientes o macetas de gran tamaño para crecer fuertes y sanas con lo que te recomendamos macetas pequeñas, semilleros o hasta vasos con agujeros si no dispones de las otras opciones. Piensa que son recipientes para un corto periodo así que si lo prefieres puedes plantar ya las semillas en una maceta de gran tamaño si ya dispones de ellas para no tener que trasplantarlas después, pero no es un requisito indispensable.

Buena iluminación

En segundo lugar, también es relevante contar con una buena iluminación. Para ello es fundamental el colocar siempre bien en un buen lugar la maceta. Bien sea en exteriores o en interiores con iluminación extra. Para ello, los focos de luz son sin duda la mejor alternativa y puedes encontrar modelos económicos y de óptima calidad.

Pero, ¿dónde debemos colocar la maceta? Deberá estar situada en un lugar con gran iluminación. Si es en el exterior, la luz del sol será suficiente. De lo contrario, usaremos focos de luz.

Nivel de humedad

Por otro lado, para cuidar al máximo las semillas germinadas como las de este catálogo de Eurogrow, dónde puedes encontrar todo tipo de semillas germinadas de marihuana de óptima calidad, te recomendamos humedecer siempre la tierra antes de plantar cualquier tipo de semilla. No es recomendable pasarse con la cantidad de agua. Asimismo, para plantar este tipo de semillas germinadas puedes usar todo tipo de tierra pero no deberías elegir tierra abonada en exceso o que incluya demasiados nutrientes si quieres evitar problemas.

Como colocar las semillas

A la hora de colocar de forma eficiente las semillas debes seguir algunas normas concretas. Primero que nada es importante usar un lápiz, palo o algún elemento similar para hacer agujeros en la tierra. En estos agujeros es dónde vas a colocar las semillas germinadas de marihuana. Para colocarlas es importante que tengas en cuenta que siempre debe hacerse con la raíz hacia abajo. Después tendrás que tapar las semillas utilizando tierra, más o menos con el grosor de un centímetro.

Cuidados de riego

En cuanto al riego debes tener en cuenta que las plantas tardarán entre tres y cuatro días en empezar a brotar en la tierra. Para que lo hagan debes valorar que la tierra no puede estar seca del todo con lo que te recomendamos humedecerla un poco sin echar demasiada agua. Tampoco deberías usar abonos ni estimuladores porque no son buenos para este tipo de semillas. Conforme vayan creciendo tendrás que aumentar un poco los requerimientos de riego pero siempre teniendo en cuenta que no debes pasarte ya que estas plantas pueden ahogarse con facilidad.

Crecer y trasplantar

Por último, si ya has plantado las semillas germinadas directamente en una maceta grande no tendrás que hacer nada más pero de lo contrario, cuando pase el tiempo verás como las semillas han salido del todo del sustrato o de la tierra. Es en esos momentos cuando tienes que dejarlas crecer hasta que sean bastante grandes. Cuando lo hayas logrado vas a poder pasarlas a una maceta nueva si es necesario. Para ello debes trasplantarlas con cuidado de no dañarlas y seguir la misma norma ya que es importante valorar que este tipo de semillas no deben plantarse en tierras con mucho abono ni estimuladores, con lo que cuanto más limpia esté la tierra mejor crecerán las semillas hasta convertirse en plantas de marihuana de calidad.